JUEGOS COOPERATIVOS PARA LA PAZ
"Jugar con otros mejor que frente a otros:
Superar desafíos, no superar a otros."
Los juegos cooperativos son una alternativa en la práctica lúdica dentro de Educación Física. Nadie compite, los jugadores se esfuerzan por conseguir el mismo objetivo.
En el Instituto Enrique de Ossó de Reynosa, dentro de la clase de Educación Física que imparte el Prof. Juan Manuel Quiroz Velázquez, se han incluido los juegos cooperativos como una importante estrategia para lograr innumerables beneficios para los alumnos, un recurso educativo que es también recomendado y practicado por la Educación Teresiana.
(Ver: V Centenario y Juegos Cooperativos para la Paz)
Los juegos deportivos cooperativos son una novedosa herramienta de la educación, como son también la pintura colectiva o el cuento colectivo.
En este tipo de juegos existe una relación directa entre los objetivos y las posibilidades de éxito de las distintas personas, de manera que cada uno sólo alcanza la meta del juego si también es alcanzada por el resto de los participantes.
Los juegos cooperativos son magnífico medio educativo dentro de la Educación Física.
Entre las más importantes aportaciones es la que plantea una meta común que solamente puede ser alcanzada a través de la actividad en grupo de los participantes, la finalidad no es superar al otro o a los otros, sino que los jugadores tratan de superar los elementos no humanos del juego, esto será lo que todos los miembros del grupo han de estar dispuestos a aportar sus capacidades en beneficio propio y en el de los demás, porque en este caso ambos coinciden.
Los jugadores necesitan estar alertas para colaborar, para comunicarse, dar y recibir ayuda, y para coordinar las acciones propias con las de los compañeros. Un elemento significativo dentro de los juegos cooperativos, que los hace especialmente válidos dentro de la Educación Física, es su carácter participativo.
Los jugadores necesitan estar alertas para colaborar, para comunicarse, dar y recibir ayuda, y para coordinar las acciones propias con las de los compañeros. Un elemento significativo dentro de los juegos cooperativos, que los hace especialmente válidos dentro de la Educación Física, es su carácter participativo.
Los alumnos seguirán progresando en el conocimiento de su propio cuerpo, en el desarrollo de sus capacidades de movimiento y en el aprendizaje afectivo y social.
Se desarrollan también capacidades estratégicas de colaboración grupal, disposición para colaborar con todos, la capacidad para establecer acuerdos, para asumir distintos roles y la creatividad motriz.
Con los juegos cooperativos los alumnos se sienten libres de la competición, de esa obligación de tratar de superar a los demás, y que ofrece más oportunidades para la actuación pro social.
Se sienten libres para crear porque se crea el ambiente adecuado para la exploración motriz y para el pensamiento divergente y creativo.
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Los alumnos se sienten libres de exclusión, porque estos juegos rompen con la "eliminación" como resultado del error. Con los juegos cooperativos, el error irá seguido de la oportunidad para rectificar y buscar nuevas soluciones motrices.
Serán libres para elegir porque es posible que los alumnos tomen decisiones y actúen de acuerdo con sus propias elecciones, lo que significa beneficio en el camino a la autonomía personal que representa el hecho educativo.
Ya que el resultado en los juegos de cooperación se alcanza coordinando las propias acciones con las de los demás, sin rivalizar en la participación del juego, se origina un clima social que no permite comportamientos agresivos y destructivos.
Estos juegos ayudan también a ganar confianza en sí mismos, son magnífica herramienta de comunicación.
Todas estas razones hacen que los juegos de cooperación sean un importante medio para la educación global de los niños; en todo lo relacionado con el movimiento corporal, en el desarrollo afectivo y social, para la educación en valores.
